La fisioterapia es una disciplina esencial dentro del área de la salud, orientada a prevenir, tratar y rehabilitar diversas afecciones que afectan el movimiento y la funcionalidad del cuerpo. A través de distintas técnicas, los profesionales formados en la carrera de Fisioterapia ayudan a las personas a recuperar su movilidad, reducir el dolor y mejorar su calidad de vida. Por ello, exploraremos las principales técnicas de fisioterapia, su aplicación y los beneficios que aportan en el proceso de recuperación física.
noviembre 12, 2025
Compartir
La terapia manual es una de las herramientas más antiguas y efectivas dentro de la fisioterapia. Consiste en el uso de las manos del terapeuta para movilizar tejidos blandos (como músculos y fascias), articulaciones y estructuras neuromusculoesqueléticas. Su objetivo es disminuir el dolor, recuperar el rango de movimiento y mejorar la función general del cuerpo.
Dentro de la terapia manual existen diversas técnicas como:
Esta técnica requiere un gran conocimiento anatómico y mucha práctica, ya que las manos del fisioterapeuta se convierten en su principal herramienta de diagnóstico y tratamiento.
La electroterapia es una técnica que emplea corrientes eléctricas con fines terapéuticos. Se utiliza para aliviar el dolor, estimular la musculatura o acelerar la cicatrización. Entre los dispositivos más comunes están el TENS (Estimulación Eléctrica Nerviosa Transcutánea), que actúa sobre los nervios para mitigar el dolor, y el EMS (Estimulación Muscular Eléctrica), que ayuda a activar los músculos debilitados. También, destaca el ultrasonido terapéutico, eficaz en lesiones profundas.
Esta herramienta no invasiva se adapta a distintas condiciones clínicas y se combina con otras terapias para potenciar los resultados. Su aplicación es frecuente en rehabilitación postoperatoria, lesiones deportivas y afecciones musculares. El fisioterapeuta elige el tipo de corriente y aparato según cada paciente. Así, la electroterapia se convierte en un recurso importante dentro del tratamiento integral.
Esta técnica se basa en la prescripción de ejercicios específicos adaptados a las condiciones del paciente. El objetivo es mejorar la fuerza, flexibilidad, equilibrio y resistencia, favoreciendo la recuperación funcional.
El ejercicio terapéutico puede incluir estiramientos dirigidos, rutinas de fortalecimiento muscular, ejercicios de reeducación postural y entrenamientos funcionales para tareas específicas del día a día. Es especialmente útil en pacientes con lesiones musculoesqueléticas, problemas de movilidad o condiciones crónicas como la artrosis. De igual forma, se adapta a todas las edades y niveles de condición física.

El kinesiotaping es una técnica que utiliza cintas adhesivas elásticas colocadas estratégicamente sobre la piel. A diferencia de los vendajes tradicionales, no limita el movimiento, sino que lo acompaña, ofreciendo soporte, mejorando la circulación y disminuyendo la inflamación.
Se emplea con frecuencia en deportistas, pero también puede ser útil en casos de linfedema, tendinitis o dolores musculares. Su efectividad depende en gran parte de una buena aplicación, por lo que el fisioterapeuta debe tener formación específica en esta técnica.
Te puede interesar: ¿Dónde puede trabajar una enfermera en el Perú?
Esta área está orientada a pacientes con enfermedades respiratorias como asma, EPOC, fibrosis quística o aquellos que han pasado por cirugías torácicas. Incluye ejercicios y maniobras para mejorar la ventilación pulmonar, favorecer la eliminación de secreciones, enseñar técnicas de respiración efectiva y prevenir complicaciones respiratorias. La fisioterapia respiratoria cobra especial relevancia en el contexto actual, donde aún existen secuelas respiratorias post COVID-19.
La hidroterapia utiliza el agua como entorno terapéutico para realizar ejercicios con menor impacto en las articulaciones. La flotación facilita el movimiento, mientras que la resistencia del agua fortalece el cuerpo sin generar sobrecarga. Por eso, es ideal para personas con dolor agudo, sobrepeso o en proceso de rehabilitación postquirúrgica. También, es muy útil en adultos mayores con movilidad reducida.
Más allá de sus beneficios físicos, la hidroterapia aporta bienestar emocional y psicológico. El entorno acuático favorece la relajación, reduce el estrés y mejora el estado de ánimo. Su enfoque integral permite tratar tanto el cuerpo como la mente, haciendo de esta técnica una opción completa. Por eso, es cada vez más valorada en diversos planes de recuperación.
Entonces, la fisioterapia es una carrera que combina el conocimiento científico con la empatía y el contacto humano. Las técnicas que hemos visto representan solo una parte del abanico de herramientas que un fisioterapeuta puede aplicar. A medida que la ciencia avanza, también lo hacen las posibilidades de tratamiento.
Para quienes están considerando estudiar esta profesión, conocer estas técnicas es apenas el comienzo de un camino lleno de aprendizaje constante. En SISE, puedes estudiar la carrera de Fisioterapia. Con nosotros aprenderás el uso de herramientas y métodos fisioterapéuticos, así como de la prescripción del ejercicio enfocado a la salud, la prevención, recuperación y potenciación del movimiento corporal. Contacta con nuestros asesores para más información. Estudia en SISE y hazla bien.

LinkedIn